La cantidad de dinero que un anfitrión puede ganar alquilando una propiedad en Booking.com depende de varios factores, incluida la ubicación de la propiedad, la singularidad y calidad del alojamiento, la temporada, la demanda y la competencia en la zona. Booking.com utiliza un modelo de comisión, donde los anfitriones pagan un porcentaje de cada reserva completada, lo que significa que Booking.com no paga a los anfitriones, sino a los huéspedes a través de la plataforma.
El porcentaje de comisión varía, pero generalmente ronda el 10-20%, aunque puede haber una “tarifa de servicio adicional” adicional dependiendo de los servicios ofrecidos por la plataforma. Los anfitriones pueden fijar sus propios precios y decidir cuándo y cuánto alquilar su propiedad. Este control directo sobre los precios les permite optimizar las ganancias en función de la demanda del mercado.
Por lo tanto, el beneficio neto será la tarifa de reserva menos las comisiones de reserva y otros costos operativos, como limpieza, mantenimiento, impuestos locales y potencialmente otros servicios como check-in y check-out. Los anfitriones pueden maximizar sus ganancias optimizando su lista de precios, mejorando el atractivo de sus anuncios y brindando experiencias y servicios de calidad que puedan justificar precios más altos.